TERAPIA FAMILIAR SISTEMICA

LA TERAPIA FAMILIAR SISTEMICA es una modalidad terapéutica que involucra a todos los miembros de la familia, trabajando con ellos en la misma sesión terapéutica. Dada la flexibilidad del modelo, pueden hacerse varias sesiones que involucren solamente a los padres y otras solo a los hijos. Estos movimientos dan una enorme riqueza de información, lo que facilita la reflexión y los modos de comunicarse de sus miembros, logrando cambios en la interacción y modos de relacionarse de unos con otros. En general, durante la entrevista inicial, se acuerdan las cuotas y número de sesiones aproximadas. Posteriormente se evalúan los cambios efectuados.

¿A quiénes se les aconseja este modelo? A aquellas personas que presentan problemas diversos a nivel familiar, ya sea porque están pasando por etapas que requieren de ciertos ajustes en el sistema familiar (hijos adolescentes, padres envejeciendo, pérdida de alguno de sus miembros, pérdida de la salud, divorcios, nuevas parejas de los padres, etc.) o porque alguno de sus miembros se presenta como síntoma, que involucra a toda la familia.  

¿Cómo trabaja? El psicoterapeuta familiar realiza intervenciones que favorecen las interacciones y modos de comunicarse de la familia, produciendo reflexiones en torno a las mismas.  Este "darse cuenta" produce cambios en el modo de relacionarse, por lo que es una terapia que actúa de manera puntual sobre objetivos precisos.  

Generalmente se pactan las sesiones con una frecuencia de cada 15 días y en algunos casos semanalmente. Se establece tentativamente un número de encuentros (10-12 sesiones) y poco antes de concluir este periodo, familia y terapeuta revisan la oportunidad de concluir o no el tratamiento.